Eva Gómez fue la última invitada al programa Camino a Viña, animado por Karen Doggenweiler, donde sus entrevistadas recuerdan aquel tiempo que estuvieron en el escenario de la Quinta Vergara.
En este sentido es que la española animó entre 2011 y 2013 con Rafael Araneda, quien nuevamente vuelve a la Ciudad Jardín.
Bajo este contexto es que Karen Doggenweiler le consultó sobre su relación: "¿Cómo es la relación con el Rafa, ¿cómo era?, la prensa decía que pelearon?”, le preguntó.
“Nunca peleamos. Efectivamente, no somos amigos, él no conoce mi casa, yo no conozco la suya”, indicó Eva Gómez.
"Para mí es como un punto de inflexión cuando alguien te abre su templo, que para mí es mi casa, y te dicen ‘ven’", agregó.
"Ahí tú ya entras en una confianza que trasgrede la televisión y traspasa los límites del compañerismo laboral", expresó la animadora española.

El complejo momento que vivió Eva Gómez
Por otro lado, la conductora reveló que por esos años lo pasó muy mal, ya que estuvo a punto de desarrollar un trastorno alimenticio por los cuestionamientos a su peso.
“Había muchos programas de farándula. Hay gente que no se da cuenta del daño que hace cuando dice cosas sin saber. Mucha gente preguntó por qué una española estaba arriba del escenario”, comentó.
Agregó que “Chile lo elegí por opción, lo elegí para tener familia, mis hijos. Entonces hablar gratis, que era fea, chica… o en el segundo año estuve a esto de tener un trastorno alimenticio, hice el Festival con 41 kilos", reveló.
"En honor a la verdad, el 2013 a mí me dio una enfermedad, era segunda vez que me dio y tuve que operarme. Lo detectan con un papanicolaou”, contó Eva Gómez.
La animadora precisó que "me lo detectaron en mayo, me sale malo. Me operé a finales de julio y en diciembre tenía que revisar de nuevo si estaba bien".
"Mi salud es lo primero, yo tengo tres hijos, para mí no era transable mi calma. Afortunadamente, me salió bien el examen, pero yo preferí dar un pie al costado", explicó.