El vocalista de Lucybell, Claudio Valenzuela vivió duros días luego de que su hija de 24 años, Amaya Valenzuela fuera internada en la UCI de la Posta Central por una severa infección en la sangre.
Tras largos días de tristeza, este viernes sus padres recibieron una buena noticia, su hija despertó por lo que pudo reencontrarse con ellos.
«Estas lágrimas ahora son de alegría. Ha pasado realmente un milagro», expresó el artista chileno a Las Últimas Noticias.
«Cuando me enteré, el día domingo, de todo lo que estaba pasando, (estando) en Estados Unidos, tuve que tomar el primer vuelo y me dijeron: ‘Ven para poder despedirte’. Cuatro o cinco días después, estuve hablando con ella y está consciente», agregó Claudio Valenzuela sobre el difícil momento que pasó su hija.
Pero al enterarse de su despertar el pasado viernes, «fue uno de los días más felices de mi vida», ya que pudo verla y conversar con ella.
«Aún falta mucho todavía por hacer, hay caminos que todavía hay que seguir, pero ya está fuera de peligro vital al menos y eso es buenísimo. Lo peor ya pasó», agregó sobre Amaya.
Claudio Valenzuela y su reencuentro con Amaya
Cuando la vio en la Posta Central, «lo primero que hice fue decirle que la amo, pese a que ya se lo había dicho antes. Pero que me dijera de vuelta que también me ama y poder escucharla, verla a los ojos y ver sus reacciones… es impagable», destacó el vocalista de Lucybell.
«Considero que nosotros, como familia, fuimos muy afortunados. Muchísimo. Yo creo que sí existen energías cuando la gente se junta y piensa algo positivo. Cuando toda la gente piensa en algo, se producen cosas y este es el resultado», expresó.
«Los médicos hoy día me decían que (Amaya) tenía comprometidos el hígado, los riñones, los pulmones y ahora está todo sano. Y nadie sabe por qué», añadió Claudio Valenzuela.
El momento en el que se enteró del complejo cuadro de salud de su hija
Cuando le dijeron que tenía que venir a despedirse de su hija, afortunadamente se encontraba acompañado de su pareja. «Para mí fue un desastre, tenía tres escalas (en el vuelo) y en cada una bajaba, conectaba el teléfono y me podía llegar cualquier noticia. Fue horrible hasta llegar acá», relató el cantante chileno.
«Yo creo que fueron los días más horribles, porque estás en una situación en la cual puede pasar cualquier cosa, en cualquier momento y no hay nada que puedas hacer. Estás a 10.000 kilómetros de distancia y no está en tus manos», agregó.
Por otro lado, Claudio Valenzuela contó que fue Nicole Ahumada, la madre de Amaya quien le contó que estaba consciente.
«Me llamó Nicole, su mamá, y me dijo: ‘Me pidió un Chocman’. Ahí yo dije ‘ya, estamos bien’. Aún obviamente faltan cosas. Hay que seguir estando atento», indicó.
«Viene todo un proceso de recuperación que hay que seguir con mucha calma y con mucha seriedad y todo. Pero lo bueno es que ya estamos acá, ella está viva», recalcó.
Finalmente agradeció el apoyo de sus seguidores, colegas, amigos y por supuesto entregó especiales palabras para los profesionales de la Posta Central, quienes estuvieron cuidando en todo sentido a su hija.
