Hay muchas maneras para que las mujeres logren conectar con ellas mismas, y una de ellas es a través del masaje vaginal, más conocido en la cultura espiritual oriental como masaje yoni.
Pero este tipo de técnica no solo te ayudará a subir la temperatura, ya que también es útil para liberar todo el estrés, la ansiedad y reducir los dolores.
Así que si estás interesada en saber más sobre el masaje yoni, te recomendamos seguir leyendo.
Qué es el masaje yoni
Yoni es la antigua palabra sánscrita para «útero», y este tipo de masajes comenzaron como una práctica espiritual que luego se transformó en una médica a medida que las personas empezaban a comprender mejor sus cuerpos
. Aunque muchos creen que sirve para llegar al orgasmo, Alexey Kuzmin, experto en sexo tántrico, explica a la revista Cosmopolitan que en realidad busca alcanzar el clímax.
«Es mucho más que una simple estimulación carnal. Por supuesto, un orgasmo puede ocurrir espontáneamente, pero un genuino masaje yoni no tiene la intención de satisfacerte en este momento, sino ayudarte a estar más satisfecho con tu vida sexual a largo plazo», señaló.
Cómo realizarlo
Es importante mencionar que este masaje vaginal te lo puedes realizar tú misma, pero a veces es mucho mejor si alguien más lo hacer por ti. Los pasos son los siguientes:
Comienza con el estómago, trabajando suavemente los músculos abdominales aplicando presión con los dedos y moviéndolos.
Toma un desvío provocando y estimulando los pezones y masajeando suavemente los senos. Luego mueve tus manos lentamente hasta tu vagina, siempre tomándote el tiempo para liberar cualquier tensión de la parte íntima de sus muslos y caderas mientras que se acerca a la zona.
Mantén una respiración profunda mientras masajeas tus labios internos y externos. Es importante que te concentres en un área a la vez y te conectes con las sensaciones que tienes en ese lugar.
El siguiente paso es con tu mano ahueca tu vulva y acumula una presión que se sienta bien para ti. Haz círculos lentamente con tu mano para mejorar el flujo sanguíneo y nutrir todas las partes por igual.
Llegó el momento de experimentar con tu clítoris con diferentes niveles de presión y diferentes movimientos. Y por último debes darte cuenta qué te gusta y qué no, también qué áreas necesitan curación o atención, ya que recuerda que el masaje vaginal consiste en que te conozcas a ti misma.
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