En una conversación a fondo con Revista Sábado de El Mercurio, el Claudio Fariña abrió su corazón y compartió aspectos poco conocidos de su vida, especialmente sobre el difícil proceso que enfrentó debido a su adicción al alcohol.
Fariña, quien formó parte de TVN durante más de 20 años, fue desvinculado del canal en 2018, un hecho que marcó un antes y un después en su vida personal y profesional.
“No tomo desde hace cinco años y me prometí renovar el pellet todos los años en noviembre. Desde hace cinco años que llega noviembre y es como si fuera un cumpleaños al que tengo que ir”, confesó el comunicador, haciendo alusión al método que usa para mantenerse sobrio.
La confesión de Claudio Fariña
Su lucha con la adicción no solo afectó su bienestar, sino también su entorno más cercano. En 2020, se produjo el quiebre de su matrimonio con la periodista Carla Zunino, luego de ser denunciado por violencia intrafamiliar.
El comunicador también compartió un momento clave que lo hizo tomar conciencia de su situación: una llamada de su madre durante el estallido social.
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“Mi mamá me llamó tres días después de que había empezado el estallido y me preguntó cómo estaba. Y yo le dije que bien, que por qué me preguntaba eso, ‘porque están quemando medio Santiago’. Y yo nunca me enteré de que había habido estallido social porque no veía las noticias y estaba encerrado en mi casa. Estaba perdido y borrado del mundo”, relató.
Hoy, el periodista ha dado un giro radical a su vida. Trabaja como garzón y también como conductor de Uber, con el objetivo de mantenerse firme económicamente y cumplir con sus responsabilidades.
“Trabajo como un garzón más y, al final del turno, reparto al personal. O sea, también Uber. Necesito pagar dos colegiaturas. Somos hijos del rigor”, aseguró con honestidad.
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