Espectáculos

Padres de Andrés Caniulef se sinceraron sobre cómo ha sido volver a vivir con él

María y Eladio están felices de volver a tener a su hijo en casa y en conversación con "LUN" contaron parte de su rutina.

Luego de años alejado de la televisión y los medios, esta semana Andrés Caniulef regresó al matinal «Bienvenidos» en su labor de panelista. Y es que durante un año y medio el periodista estuvo internado en la Clínica Crea Chile debido a su adicción a las drogas.

Tras ser dado de alta, uno de los primeros pasos del comunicador fue volver a vivir con sus padres. «Vendieron su casa y se vinieron a este departamento, afortunadamente tenían una habitación extra que ocupaban los nietos cuando venían y ahora la ocupo yo», detalló Andrés a «LUN».

Respecto al hecho de ‘volver al nido’, Caniulef aseguró que «es necesario vivir esta transición desde el origen, desde la casa de mis papás. Compartir con ellos y darme la oportunidad de volver a ser hijo, a dejarme querer de esta forma«.

La rutina de Andrés Caniulef con sus papás

Sus padres, por su lado, también se sienten muy cómodos con el regreso de su hijo a su hogar y se lo han demostrado con comida, agrega el periodista.

Foto LUN

«Somos buenos para ver juntos las noticias y comentarios de Canal 13 (…) Los domingos en la mañana nos gusta ver programas de política y documentales de historia. Siempre me ha gustado ver noticias», detalló al medio Eladio, el padre de Andrés.

Su madre, María, afirma que su hijo es muy hacendoso. «Su pieza está ordenada, deja la cama hecha, y el fin de semana la dio vuelta limpiando. Ahora que está trabajando se va a la pieza con su computador, antes se sentaba con nosotros en el living a mirar tele», añadió.

«Estamos muy contentos aquí con él. Él también. Es un niño nuevo y que se porta bien. Tenemos que tirar para arriba», comentó la mujer. «Volver a estar con él ha sido verlo renacer. Ver a un hijo que creció con nosotros, que lo educamos, desapareció… Y ahora vuelve alegre, contento. Nuestro hijo se recuperó, gracias a Dios», concluyó el padre


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