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Descubre por qué cantar en la ducha es bueno para la salud

Entre otras razones, esta práctica relaja y ayuda a fortalecer el sistema inmunitario.

Aunque es una práctica sencilla, lo cierto es que cantar en la ducha otorga muchos beneficios.

Numerosos estudios así lo confirman, demostrando que este acto cotidiano es una poderosa arma contra el estrés y la ansiedad.

¿Qué otras ventajas tiene cantar en la ducha? ¡Revísalas a continuación!

Tonifica los músculos

Los pulmones rinden a pleno rendimiento al cantar, tonificando así los músculos abdominales e intercostales y el diafragma. Esta práctica es muy útil para estimular la circulación, aumentar la capacidad aeróbica, combatir los ronquidos y aportar una mayor cantidad de oxígeno al organismo.

Fortalece el sistema inmunológico

Según un estudio de la Universidad de Frankfurt, cantar en la ducha libera endorfinas del sistema nervioso, aumentando también los niveles de hidrocortisona, que alivia la hinchazón; y los de inmunoglobulina A, proteína que actúa como anticuerpo para combatir la infección de virus y bacterias.

Favorece la memoria y la concentración

Tanto la música como el canto permiten a la persona entrenar diversas funciones cerebrales como la atención, la memoria o la concentración.  Además, es capaz de equilibrar la actividad nerviosa simpática del organismo, dando una sensación de tranquilidad al individuo.

Cantar en la ducha es bueno para la salud.

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Aporta elasticidad a la piel

Al cantar, los músculos del cuerpo, especialmente del rostro, están en continuo movimiento. Un ejercicio que aporta elasticidad a la piel, además de retrasar la aparición de las arrugas propias de la edad.

Mantiene sano el corazón

Un grupo de investigadores de la Universidad de Gotemburgo, en Suecia, descubrió que cantar bajo la ducha tiene un efecto similar al de los ejercicios de respiración recomendados para relajarse. Al conseguir este efecto, el ritmo cardíaco se ralentiza, se regula la presión arterial y la sangre se oxigena correctamente.

Y a todo ello hay que sumarle que escuchar música potencia el autoestima y mejora el humor. Por lo tanto, cuando cantas en la ducha, te sientes más feliz y liberas el estrés del día a día.

Ante esta situación, ¿a quién no le dan ganas de cantar una canción mientras se ducha?


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