El actor chileno Cristián de la Fuente tuvo una reveladora conversación con Martín Cárcamo. Específicamente al recordar la difícil relación con su padre.
El intérprete confesó que ha ido a varias terapias psicológicas, porque desde muy chico tuvo una necesidad de demostrar al resto que era bueno en lo que hacía. »
«(Eso viene de) ser el hijo de la amante de mi papá y tener que demostrar que yo valgo lo suficiente para ser parte de la otra familia», dijo.
La emoción se notó en sus palabras. «Yo nací en una casa, tenía una mamá, y tenía un papá que vivía en otra casa con una tía y mis hermanos. Y mi papá iba todos los días a mi casa a verme de seis a diez de la noche, yo los viernes iba a almorzar a la casa de mi tía con mis hermanos y los domingos mi papá iba a comer a mi casa conmigo y mi mamá. Entonces así me criaron a mí, esa era mi realidad», confesó.
Luego, agregó: «Con el tiempo fui creciendo y me fui dando cuenta que esta cuestión no era normal, que las casas eran distintas, y al darme cuenta uno tiene que aceptarlo y empezar a entenderlo, vivir con eso y tener que explicarlo».
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De la Fuente explicó que de ahí viene gran parte de su actuar. «De decirle a mi papá: soy igual de bueno o mejor que el resto de tus hijos, entonces también merezco que me pesques, también merezco el apellido, también merezco ser parte de la familia», relató.
La relación con su padre cuando joven
La relación con su papá de joven tampoco fue tan buena, incluso reveló que su progenitor era alcohólico.
«Tuve muchas conversaciones con él, aparte yo siempre supe que mi papá iba a morir joven. Mucha gente me dice ‘tú que no estudiaste teatro’. No estudié teatro porque no tuve tiempo. Yo siempre pensé que mi papá se iba a morir cuando tuviera 21 años. Me equivoqué, se murió cuando tenía 22«, expresó.
Cristián igualmente recuerda que su padre «llevaba una vida muy al límite».
En esa línea, él confesó que no tuvo tiempo para estudiar Teatro, como muchos de sus compañeros. «Siempre supe que se iba a morir, cuenta, por eso no tuve tiempo para estudiar, sabía que tenía que empezar a trabajar rápido. Por eso entré a Canal 13 a los 18 años, porque tenía que trabajar rápido, porque cuando mi papá se muriera yo tenía que mantener a mi mamá. Entonces yo siempre viví con esa realidad», explicó el actor de 46 años.
Igualmente, él recuerda a su papá de buena manera. «No me tocó el escenario que quería, no me tocó la realidad de mi papá, que fue un excelente padre, me hubiera encantado que no hubiera sido alcohólico, que estuviera vivo hoy y poder abrazarlo. Me hubiera encantado que en mi familia hubiéramos sido todos una familia, pero no fue así y así tuve que jugar y darle para adelante», contó.
Recordemos que el actor antes de la pandemia volvió a Chile junto a su esposa, Angélica Castro y su hija Laura. Llevaban casi dos décadas viviendo en Estados Unidos.