Jenna Bush Hager, hija de George W. Bush asegura que en la casa de gobierno norteamericano vivió episodios paranormales. Su hermana, Barbara, había relatado momentos similares en el pasado.
La Casa Blanca estaría embrujada y en su interior vivirían "amistosos seres que deambulan por sus pasillos", según dijo Jenna Bush Hager al The Today Show, quien vivió en la casa presidencial entre 2001 y 2009.
"Mi teléfono sonó y nos despertó en mitad de la noche. Teníamos una chimenea en nuestra habitación, y de repente empezamos a escuchar música de piano, como de los años 20, que salía de la chimenea, y se oía tan claro como el día", dijo Jenna, quién saltó de miedo a la cama de su gemela Barbara, quien también estaba despierta durante el extraño suceso.
"La semana siguiente escuchamos lo mismo, pero era ópera", asegura Bush.
Pero los eventos paranormales no se detuvieron ahí. Jenna compartió lo vivido con un funcionario de la casa presidencial, al cuál le dije, "'no vas a creer lo que escuchamos anoche'. Y él me contestó, 'tú no creerías lo que yo he escuchado'. (La casa) Está encantada. Da miedo, pero vienen con buenas intenciones. Son fantasmas amistosos", finalizó Bush.
