Puede que estés en una relación sin mayores problemas, que no existan celos ni otros conflictos. Pese a la comodidad en la que te encuentras, de repente sientes unas angustiantes ganas de huir. O puede ser el caso contrario. ¿Cómo explicamos esto?
Esta comodidad llama al auto-sabotaje, lo que provoca que uno de los integrantes de la relación tiende a desaparecer, produciendo una desconexión entre la pareja y generando incertidumbre y lejanía.
La inseguridad es una de las causas de estas desapariciones repentinas. Como te sientes aburrido, puede que la preocupación extrema por el futuro te lleve a un montón de pensamientos negativos.
Es importante también no caer en la rutina, porque la relación se vuelve monótona y desencadena el aburrimiento.
Si sientes que estás en esa situación, la única solución es la comunicación con tu pareja, ya que en el amor y en las relaciones no hay nadie perfecto. Conversando, pueden comprender mutuamente sus problemas y preocupaciones en el futuro
