Hace casi un mes se dio a conocer la sentencia de Johanna Hernández y Francisco Silva por el homicidio de Nibaldo Villegas. Hoy ambos cumplen su condena, de 40 y 20 años respectivamente, aunque de manera muy distinta.
Según consigna «La Cuarta», la pareja viviría realidades opuestas en la cárcel. Johanna, por su parte, participa de talleres de alimentación y peluquería donde comparte con otras reclusas; estas le mostrarían respeto por el crimen cometido.
Además Hernández recibe la visita de amigos y familiares los días en que está permitido, según relatan fuentes al interior del recinto penitenciario. Es más, la exesposa de Nibaldo Villegas ya habría encontrado un nueva pareja al interior del módulo 210-D.
Esta situación sería completamente opuesta a la que vive su expareja. Silva está aislado del resto de la población penal debido al odio que se ha ganado entre los reos por su crimen. Además recientemente fue castigado luego de que hallaran un celular en el módulo 107 de la Unidad Especial de Alta Seguridad de la cárcel de Valparaíso, donde él se encuentra.
«Silva es un preso que está bajo la lupa por un crimen de alta connotación pública. Está completamente solo. No sale al patio cuando están los otros internos», señaló un trabajador de la cárcel al citado medio.
