Nicolás Saavedra será uno de los protagonistas del nuevo capítulo de La Divina Comida, que se emitirá este sábado por las pantallas de Chilevisión. En esta edición, el actor compartirá mesa y conversación con el popular influencer conocido como el Compadre Moncho, además de Berta Lasala y Allison Göhler.
Durante la velada, al recibir a sus invitados en su hogar, abrirá las puertas no solo de su casa, sino también de su vida personal.
En una íntima conversación, repasará diversos momentos de su carrera en el mundo de las teleseries, así como aspectos más personales, entre ellos el término de su relación con la también actriz Mónica Godoy, con quien estuvo más de dos décadas.
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En ese contexto, el actor abordará con honestidad el proceso que significó el quiebre amoroso, reconociendo que lo más difícil fue pensar en cómo sus hijas enfrentarían la separación.
"Son experiencias difíciles sobre todo para las niñas que son chicas", comentará en el programa, evidenciando la preocupación que tuvo por el bienestar emocional de sus hijas durante ese proceso.
A pesar de lo complejo de la situación, Saavedra dará cuenta de que, con el paso del tiempo, ha logrado mantener una relación cordial y estable con Mónica Godoy
"Tenemos una buena relación, una buena coordinación, es cordial. Nosotros estamos bien, ya ha pasado tiempo", señalará, dejando entrever que han logrado encontrar un equilibrio en su vínculo como padres.
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La promesa que Nicolás Saavedra le cumplió a sus hijas
Además, el actor revelará que, tras la separación, tomó decisiones importantes, como priorizar aún más el vínculo con sus hijas y cumplir ciertos compromisos personales que había postergado.
"Los dos primeros años yo las puse a ellas súper en primer lugar y dejé pasar trabajos por cumplirle la palabra con ciertas cosas que eran importantes para todos", relatará.
Así, Nicolás Saavedra contará que junto a sus hijas tenían el anhelo de viajar a Disney, un sueño por el que trabajaron en conjunto durante dos años.
Participaron con él en pequeños proyectos, como una publicidad de cereal, y acordaron destinar todo el dinero ganado a una cuenta especial para cumplir ese objetivo. Así nació la idea del viaje, convirtiéndolo en una experiencia compartida en familia.
