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Lo que jamás debieras cenar si quieres bajar de peso

Hay cierto alimentos que no debieras comer por nada del mundo.

Si quieres bajar de peso, tiene que comer sanamente y realizar ejercicio. 

Para lograr mejores resultados, tiene que saber lo que no debieras comer en la noche y lo que si es recomendable.

A la hora de la cena, es muy importante tener estos puntos en consideración:

Lo que tienes no debieras comer

Si durante la tarde «tomas once» o te comes un snack (un sándwich, un yogur, una pieza de fruta o barrita de cereales…), nos resultará más fácil comer una cena ligera, con una elección lógica y razonada de los alimentos.

  • Grasas: Parece una obviedad, pero conviene recalcar que se debe evitar cualquier fritura, rebozado, harinados o similares; ya que son platos muy calóricos para este momentos del día en el que ya nos estamos preparando para ir a la cama. El cuerpo no va a hacer nada para quemarlo y lo almacenará como fuente de energía.
  • Hidratos: Por hidratos entendemos: arroces, patatas, pasta, pan, cereales, galletas y todo lo que lleve algún tipo de harina en su elaboración. Es mejor tomarlos en cantidades moderadas.
  • Embutidos y fiambres: Cenar entremeses no es tan buena idea como creemos. Son fuentes de grasas y aportan calorías de mala calidad que hacen que engordemos rápidamente.
  • Refrescos y otras bebidas: Lo ideal es cenar con agua, entendemos que al final del día pueda apetecer un refresco de cola o, incluso, una cerveza, sin embargo no es la mejor idea del mundo. El alcohol y las bebidas con burbujas engordan… Es la realidad.

 

Lo ideal para consumir en nuestras cenas

  • Pescados a la plancha o al vapor. Pollo a la plancha, hervido o al horno.
  • Una tortilla con pavo o jamón (cocido).
  • Verduras (salteadas al wok, al horno…)
  • Ensaladas…

De esta manera no sólo conseguiremos que nuestro cuerpo no almacene grasa, si no que, además, haremos que el descanso sea mayor ya que, a la hora de dormir, el cuerpo estará relajado y no trabajando a destajo para hacer la digestión. Nos levantaremos más ligeros y listos para un desayuno de campeones antes de empezar un nuevo día.

 

Fuente: RevistaHola!


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