Además de quemar calorías, mejorar el vínculo amoroso y combatir el estrés, el sexo ha demostrado que es una de las prácticas ideales para fortalecer el sistema inmunológico.
Es decir, para proteger tu cuerpo de virus y bacterias causantes de enfermedades.
Un estudio reciente, realizado por la Clínica Universitaria de Essen (Alemania), constató que los orgasmos aumentan los niveles de oxitocina y dopamina durante el sexo.
Componentes químicos que estimulan al sistema inmunológico y lo fortalecen al momento de afrontar amenazas externas como virus.
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Durante la investigación se analizó el recuento de glóbulos blancos de 11 participantes, presentes en sus cuerpos 5 minutos antes y 45 minutos después de cada orgasmo.
Ello, con el objetivo de comprobar el aumento de estos glóbulos, en especial de las ‘células asesinas’, encargadas de combatir infecciones.
Y el resultado es que efectivamente se elevaron durante la relación sexual.
