La cantante llegó con un vestuario que incluyó performance con bailarines incluidos.
Fue elegida como una de las anfitrionas en la MET Gala 2019, y cómo no si su vestido era una verdadera obra de arte. Lady Gaga llegó hasta el Museo Metropolitano de Nueva York para desfilar en la alfombra rosa del evento.
Pese a que su disco «Joanne» está más cercana al folk, Lady Gaga decidió hacer las cosas como ella mejor le viene en gana y lució un especial vestido, volviendo así a ser la Lady Gaga que conocimos en un principio.
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Para la ocasión, la cantante trabajó con Brandon Maxwell, estilista con que confeccionó uno de sus looks más osados: el vestido de carne del MTV VMA 2010.
En esta oportunidad, Gaga y su equipo apostaron por un vestido desmontable, que incluso contó con un show con bailarines.
Lady Gaga llegó con un diseño que poco a poco se fue transformando. La llegada de la estadounidense se extendió por más de 20 minutos. Sin duda, una aparición para recordar. Acá te dejamos algunas postales:
