En contraposición a las uñas más recargadas, ya sea con perlas incrustadas, confeti o incluso pompones, aparece una manicure mucho más simple y sofisticada.
Se trata de un nail art en el que necesitas una sola línea de color para hacer magia en tus uñas.
Esta tendencia minimalista y atemporal, apta para las más tímidas, se asoma entre las que serán furor en la próxima temporada primavera-verano.
Puedes optar por diseños en tonos neutros, como negro, beige o blanco. O bien, apostar por elegir una pincelada de color diferente para cada uña.
Sea como sea, lo único que tienes que hacer es pintar las uñas con una tonalidad base de tu elección, dejarla secar y rematar el diseño con una línea que la atraviese.
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Pueden ser líneas verticales, horizontales y hasta curvilíneas, si te inclinas por algo menos convencional.
Una tendencia nail art fácil de hacer en casa y que no requiere muchas horas ni pulso de profesional. ¿Te animas con esta propuesta?
