Las relaciones personales suelen no ser fáciles, pero a todos nos gusta tener éxito en ellas. Ante esto, la actitud que adoptamos es clave, y existen ciertos comportamientos que lamentablemente pueden terminar alejándolos de las personas.
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Si es que esto te ha pasado en algún momento, podría ser porque estás incurriendo en algún comportamiento en particular. A continuación, te dejamos una lista con las conductas que los expertos señalan como las más comunes para alejar a las personas:
Tomarse todo a pecho
No todo tiene una connotación personal, y si hoy felicitaron a la persona que tienes al lado por su trabajo, no significa que sea porque tú lo estás haciendo mal. No cuestiones ni desmerezcas tu valor.
Frente a esto, la recomendación de los especialistas es recordar que no somos los mejores en todo, y desde ahí nos quitamos un gran peso de encima. Además, no somos el centro del universo, por lo que no debemos sobrerreaccionar.
Celos
Nunca ha sido positivo ser celoso, y menos si es que hay un nivel de descontrol de por medio. Para evitar la frustración de que los demás no entiendan tus celos, es mejor evitar las comparaciones con los demás.
Creer que los halagos son necesarios
Todos queremos ser halagados. Sin embargo, necesitar esto para poder funcionar no es algo sano. Cada uno es único y ese es el halago que debemos recordar siempre. De otra forma quiere decir que no te quieres lo suficiente.
Rechazar las críticas constructivas
A nadie le gusta que le hagan notar sus errores, pero a veces hay personas que lo hacen porque ven algo que podemos mejorar. Al reconocer nuestros defectos, dicen los expertos, fortalecemos nuestra autoestima. Si no aceptamos los comentarios negativos, no superamos nuestros problemas.
Actitud de víctima
Siempre estás en el peor escenario. Generar lástima solo funciona por poco tiempo. Al ser un comportamiento recurrente las personas lo rechazan.
Estar siempre desde el lado negativo de las cosas no hará que los demás confíen en nosotros.
Ser sincero, en extremo
Si no nos han pedido la opinión, ser honestos puede dañar nuestra imagen. Podemos incomodar a las personas y hacerlos creer que somos muy prejuicicoso, imprudentes, irrespetuosos y apáticos. Es mejor pecar de prudente que decir algo que dos segundos después generó el bloqueo de los demás. Y
También es importante ganarse la confianza de quienes nos rodean primero, para poder después opinar sin que nos llamen.