La muerte de Sophia, la menor de un año y once meses sigue conmocionando al país. Y es que luego de que las pericias revelaran, Sophia falleció por aplastamiento, con al menos seis órganos dañados, sumado a signos un tanto evidentes de abuso sexual, se dieron a conocer nuevo antecedentes.
Y es que según un reportaje publicado por el diario El Llanquihue, se revelan datos aun más preocupantes sobre la vida de la pequeña y episodios de violencia. De acuerdo a la publicación, Sophia había sido llevada de urgencia en 14 ocasiones a centros de salud durante el 2017.
En estas repetidas ocasiones, al menos tres tenían relación con golpes, pero a pesar de ellos, dentro de los recintos médicos no se realizó una alerta a las autoridades correspondientes. Según reporta Chilevisión noticias, incluso, entre el 21 y el 25 de enero del 2018, la menor fue víctima de otras agresiones que fueron calificadas como «»un trauma contuso compatible con niño sacudido y un trauma contuso facial, cervical y de miembros compatible con manipulación o contención enérgica con dedos y manos».
Por otro lado, según los registros del Cesfam, la menor no acudió a sus controles durante casi todo el 2017, a pesar de presentar estos traslados de urgencia (14), de los cuales la mayoría se relacionaban con síntomas de diarrea, vómito, resfríos, entre otras dolencias.
