El día de ayer, Eric Swarbrick, un acosador de los cientos a los que se ha debido enfrentar la cantante Taylor Swift, fue condenado a 30 meses en prisión, según detalla el medio estadounidense, Forbes.
De la misma forma, la justicia le dieron tres años adicionales de libertad vigilada.
Lo anterior debido a las amenazas dirigidos a la intérprete desde el año 2018 y hasta mediados del año pasado.
De forma más concreta, este hombre comenzó a enviar una serie de cartas a las oficinas de la entonces discográfica de la artista, Big Machine Records.
Esto con el fin de que la disquera intercediera para propiciar un encuentro entre ambos.
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Ante la negativa de la firma, el contenido de las cartas se tornó cada vez más agresivo por parte del acosador.
El nativo de Austin, Texas, se declaró culpable de enviar mensajes con amenazas a la cantante, algunos de ellos entregados de manera presencial en el edificio de la disquera.
El 2 de agosto de 2018, cuando se produjo su primera detención por parte de la policía metropolitana de la ciudad de Nashville.
Y fue debido a este mismo incidente, que Swift llegó hasta la corte para interponer una orden de restricción contra Swarbrick.
Debido a que este amenazara con violarla y matarla.
En ese entonces, la intérprete de Folklore comentó que que estos mensajes la dejaron “estresada, ansiosa y asustada”.