Durante un especial adelantado de Navidad en el podcast "Mari con Edu", Eduardo Fuentes y María Luisa Godoy se dieron el gusto de repasar anécdotas de fin de año.
Entre risas y recuerdos, el conductor sorprendió al revelar una experiencia tan insólita como incómoda que le tocó vivir hace años en una celebración televisiva.
La conversación derivó rápidamente al clásico "amigo secreto" de oficina. Para Fuentes, este tipo de dinámicas siempre tienen un grado de incertidumbre. "Es como un tema medio tabú, sobre todo en los trabajos", comentó, antes de abrir la puerta a una historia que aún lo deja descolocado.
Sigue a FMDOS.CL en Google Discover
Recibe nuestros contenidos directamente en tu feed.
El regalo inesperado de Eduardo Fuentes
El episodio ocurrió cuando trabajaba en Canal 13, en una época en que los equipos de "3x3" y "En boca de todos" compartían producción. Para cerrar el año, decidieron organizar una fiesta conjunta en la casa de los padres de Nicolás Ortiz, donde también se realizaría el intercambio de regalos.
Según relató, la situación tuvo un giro inesperado desde el inicio. Sin saberlo, él y otro periodista terminaron siendo mutuamente sus "amigos secretos". Fuentes contó que se tomó el regalo muy en serio: compró un libro de periodismo de alto valor, pensando tanto en la profesión como en el vínculo que tenía con su colega, quien incluso había sido su ayudante en la universidad.
El momento de entregar ese obsequio fue impecable. El libro fue bien recibido y generó comentarios positivos entre los asistentes. Sin embargo, el ambiente cambió por completo cuando llegó el turno de Eduardo de abrir su paquete.
Dentro de la bolsa apareció primero un rollo de papel higiénico. La sorpresa aumentó cuando encontró un sobre con una película porno pirata. La entonces productora ejecutiva, Fran Lira, preguntó quién había hecho ese regalo, hasta que el responsable levantó la mano.
Fuentes recordó que, pese a lo incómodo del momento, intentó bajarle el perfil con humor para aliviar la tensión. Aun así, reconoció que la diferencia entre ambos regalos hizo que la situación fuera especialmente dura para quien se había "pasado de listo".
Con el tiempo, el episodio tuvo un cierre más tranquilo. El colega se acercó a pedir disculpas y admitió que se había desubicado. "Pensé que era una broma, pero tú me regalaste justo el libro que yo quería", le dijo.
Leer también:
