Cada vez que Netflix estrena algo nuevo en su catálogo da qué hablar, tal y como ocurrió ahora con su nuevo documental Cuiden a Maya, lanzado el día lunes 19 de junio.
Esta nueva producción se aleja totalmente del crimen, pero se relaciona con la justicia y una terrible negligencia médica que dejó a la familia Kowalski con un lamentable desenlace.
Detalles de Cuiden a Maya
Para comenzar a relatar el documental, te dejaremos el tráiler para que te hagas las primeras impresiones.
Todo ocurrió a finales de 2016 cuando Beata y Jack Kowalski llevaron de emergencia a su hija Maya a un hospital en Estados Unidos por un fuerte dolor.
Sin embargo, los médicos no podían descifrar la dolencia que tenía la pequeña niña de 10 años, por lo que los profesionales comenzaron a cuestionar la relación y el trato que su familia tenía con la menor de edad.
Tras esto, de una manera inesperada, la protagonista de Cuiden a Maya de Netflix, quedó bajo custodia legal y sus padres quedaron destrozados. Sin embargo, eso no sería lo peor.
¿Qué ocurrió con Maya Kowalski?: contiene spoilers
Durante 2015 y 2016, la niña comenzó a sufrir un montón de dolencias, desde ataques de asma, intensos dolores de cabeza, calambres, hasta enroscamiento de sus pies.
Tras esto, la llevaron a urgencias pero ningún médico pudo dar con lo que tenía, incluso uno comentó que todo se trataría de algo de su mente.
«Pero Maya lloraba las 24 horas del día, los 7 días de la semana. Sabíamos que no estaba fingiendo», explicó Jack, el padre de la protagoniza de Netflix. Hay que destacar que Beata, la madre de Maya, era enfermera.
De hecho, ella y su marido averiguaron sobre el síndrome de dolor regional complejo (SDRC) y se lo comunicaron a un médico para que lo confirmara.
De esta manera es que el doctor Anthony Kirkpatrick reafirmó sus sospechas y la diagnosticó con el trastorno neurológico raro e incurable. Además, la niña de Cuiden a Maya inició un tratamiento con ketamina para aliviar síntomas, lo que funcionó.
Sin embargo, en 2016, Maya sintió un terrible dolor estomacal por lo que sus padres corrieron al hospital. En el recinto, su madre pidió que le dieran ketamina, por lo que aquí comenzaron las sospechas del personal médico, quienes contactaron a los servicios de protección infantil.
De hecho, un equipo de investigación acusó a Beata, la mujer de 43 años de abuso infantil por padecer de un supuesto trastorno facticio impuesto a otro (antes llamado síndrome de Munchausen por poderes).
Un desenlace fatal en Cuiden a Maya
Tras esto, se reveló en el documental de Netflix que se ordenó una evaluación mental y se determinó que la mujer no padecía esta enfermedad. Pese a esto, Maya de igual manera terminó bajo custodia estatal.
Esta decisión destrozó completamente a Beata.
“Traté de tener esperanza, pero hubo un punto en el que pensé: ‘Nunca saldré de este lugar”, contó Maya a la revista People.
Y lamentablemente Maya y Beata nunca más se volvieron a ver, ya que luego de 87 días separadas, la mujer se quitó la vida y a los pocos días de su deceso, Maya fue devuelta a su padre por lo que la niña pudo volver a casa.
«Un día estaba en la UCI y mi madre me besó en la frente y me dijo: ‘Te amo. Te veré mañana’. Nunca la volví a ver. Me secuestraron médicamente», comentó la joven de ahora 17 años.
¿Cuál es el presente de la joven?
La protagonista de Cuiden a Maya de Netflix, actualmente tiene 17 años y vive en Florida con su padre y hermano.
Al día de hoy la joven todavía sigue teniendo fuertes dolores. «Hago todo lo posible para salir adelante. Ahora quiero aprovechar al máximo la vida», reveló al medio.
Cabe destacar que Maya y su familia presentaron una demanda en contra del hospital por lo ocurrido. «Quiero justicia para mi mamá. Para que nosotros, como familia, podamos seguir adelante, tenemos que cumplir el deseo de mi madre y luchar», destacó la joven de Cuiden a Maya.