Este miércoles se dio a conocer la denuncia en redes sociales de Rafaela Vicuña Moraga, quien reveló haber sido víctima de violación a los 13 años.
‘Estoy haciendo una carpeta con testimonios para llevarla a fiscalía y ya tengo varios’, expresó la joven de 18 años, quien toca el violonchelo.
Según comentó, el episodio le ha costado ‘muchos problemas mentales, traumas, inseguridades y ser diagnosticada con bipolaridad y depresión’.
‘Muy orgullo de mi sobrina’
Sin duda, una denuncia que conmocionó a toda la familia. Entre ellos a Benjamín Vicuña, quien rompió el silencio sobre el caso que afecta a su sobrina.
‘Es tremendo lo que pasó, es algo muy doloroso. Rafa hizo la denuncia y descargo vía Instagram, y el tema ya está en la justicia chilena’, expresó el actor.
‘Estoy muy orgulloso de mi sobrina, de su valentía y coraje. Ella va a transformar el dolor en arte, en su música, que es lo que más ama y que nadie le puede robar. Es el principio de un proceso de liberación y reparación. No elegimos los obstáculos en la vida, sí cómo superarlos’, agregó.
Además, Benjamín Vicuña señaló que su sobrina actualmente se encuentra en Chile, ‘con toda la contención profesional y familiar’.
Estas declaraciones las emitió a Nicolás Peralta, conductor del programa argentino ‘Cortá por Lozano’ de Telefé.
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‘Que se haga justicia’
Rafaela Vicuña, por su parte, explicó que necesitaba sacarse de encima un peso que ha cargado por demasiado tiempo.
Pero además quiso hacer pública su denuncia para ayudar a otras mujeres a que no pasen por lo mismo.
Los hechos ocurrieron en un campamento de música. Allí Rafaela Vicuña conoció a un hombre de 24 años, quien poco a poco se acercó para entablar una amistad.
‘Siendo una niña nunca le tomé el peso a esto y lo dejé pasar, debí haber hablado con uno de los encargados del departamento. Pero no lo hice’, relató la joven, quien sí dejó en claro que mantuvo la distancia.
Tras asistir juntos a una fiesta de despedida del campamento, donde había drogas y alcohol, ambos volvieron a casa. Y fue en ese momento en que el hombre la besó, tocó y violó.
Pero el drama no terminó ahí, ya que el violador la siguió acosando. Esto, hasta que su madre pudo leer las conversaciones y entonces solicitó una orden de alejamiento.
