El viernes 8 de abril se promulga la Ley Devuélveme mi casa, que modifica la actual Ley 18.101 que decreta normativas respecto al arrendamiento de predios urbanos.
El proyecto originado en el Senado fue despachado con 123 votos a favor, 19 en contra y 9 abstenciones en la Cámara de Diputadas y Diputados de Chile el miércoles 6 de abril.
La normativa tiene el propósito de reforzar los derechos de los propietarios de inmuebles frente a arrendatarios rebeldes.
Por otro lado, también da instrumentos para facilitar el cobro de la renta. Y en caso de problemas, como morosidades o daños a la vivienda, poder desalojar.
¿Cómo funciona la nueva Ley Devuélveme mi casa?
La nueva Ley Devuélveme mi casa, le da el poder a un juez de ordenar la restitución anticipada de la vivienda como manera preventiva si el arrendatario demandado tiene un “comportamiento irresponsable en pago o cuidado del inmueble”.
Y en caso de que ese se niegue, puede ordenar a la fuerza pública proceder en el desalojo.
¿A qué se arriesgan los arrendatarios morosos?
La Ley Devuélveme mi casa accionará un proceso más rápido y simple para cobrar y desalojar en caso que sea necesario.
Eso quiere decir que, que si el propietario de la vivienda comprueba ante un juez que su arrendatario es deudor, el demandado tendrá 10 días corridos para pagar lo decretado.
Y si la parte no resuelve la morosidad, se le cobrará de nuevo el monto. Y además se agregará la sanción de desalojar el inmueble, junto con todos los co-habitantes, en un plazo de 10 días.
El aviso de demanda o resolución puede ser recibido por cualquier persona mayor de edad que esté en la vivienda, o que se encuentre en el lugar de trabajo de la persona demandada, según la Ley Devuélveme mi casa.
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